¿HAY ALGO EN TU VIDA QUE DESEARÍAS CAMBIAR?

 

¡Qué pregunta!

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Bendiciones,

Enio

Meditación Diaria  

¿HAY ALGO EN TU VIDA QUE DESEARÍAS CAMBIAR?

 

COLOSENSES 1:9-12 “Pedimos que DIOS les haga conocer plenamente Su voluntad con toda sabiduría y comprensión espiritual, para que vivan de manera digna del Señor, agradándole en todo. Esto implica dar fruto en toda buena obra, crecer en el conocimiento de DIOS y ser fortalecidos en todo sentido con Su glorioso poder. Así perseverarán con paciencia en toda situación, dando gracias con alegría al Padre. Él los ha facultado para participar de la herencia de los santos en el reino de la luz".

 

Cuándo miras al pasado, ¿hay algo en tu vida que desearías cambiar?

Esa fue la pregunta que se hizo unos años atrás en una encuesta. Lo especial de la misma es que se hizo sólo a personas mayores de 95 años.

Era una pregunta abierta, a la cual quien respondía podía dar la respuesta que deseara. No había ningún tipo de manipuleo religioso; todo lo que tenían que hacer era dar su respuesta a la pregunta.

"¿Hay algo en su vida que desearía cambiar?"

Hubieron muchas respuestas, pero la mayoría caían en tres categorías:

1. Dedicaría más tiempo a la meditación (la respuesta más popular)

2. Correría más riesgos

3. Haría más cosas que perduraran después que me muera

Si bien todavía no hemos alcanzado los 95 años, tratemos de responder estas preguntas con respecto a nuestras vidas.

¿Qué cambiaría de lo vivido hasta este momento?

Si pudiera comenzar de nuevo, ¿qué haría diferente?

Después de pensar bien, creo que todos esos ancianos en sus años dorados nos dan una buena idea. Definitivamente pasaría más tiempo meditando en la misericordia de DIOS y en la bendición que es tener un Salvador.

También correría más riesgos y sería más valiente en aquellas batallas en las que el Salvador está siendo menospreciado y burlado.  

Por último, haría más cosas que tuvieran un mayor impacto para el bien del Reino de DIOS. Trataría de dejar una herencia a las generaciones futuras, a los que serán perseguidos y sometidos por mantenerse firmes en su fe en Jesús.

En realidad, no necesito comenzar de nuevo para hacer todo ésto, ni tampoco esperar a tener 95 años, sino que lo puedo hacer a partir de este momento y tú también lo puedas hacer.

OREMOS: Amado Señor, ruego para que mis momentos de meditación puedan estar centrados en Tí y en Tus propósitos. Ayúdame a vivir una vida que sea de Tu aprobación. En el nombre de Jesús, amén.

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