Con una sonrisa del corazón.
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
TODO ESTÁ EN UNA SONRISA
Renuevo de
Plenitud
JOB 29:24 “Si les sonreía, no podían creerlo;
una sonrisa mía les daba ánimo”
Cuando
pensamos en las cosas que pueden pasar en la vida, las preocupaciones, los
problemas, el estrés y las luchas, nos olvidamos de una cosa que puede
cambiarlo todo: y ésa es una sonrisa que puede
ser hallada en abundancia.
En
el Hospital Christie en Manchester, lo primero que uno ve es una sonrisa en un
rostro dirigida a un extraño—a un paciente como yo. Y no es algo extraño
dondequiera que vayamos, hay siempre una sonrisa, un rostro cálido y un brillo.
El personal es fantástico y provee un
sentimiento de paz haciéndonos sentir que no nos sobrevendrá ningún daño.
¿Y
cómo es que lo logran? Con serenidad y astucia, mientras realizan sus labores
diarias con una eminente sonrisa.
Pero una cosa inspira a cada uno de los
pacientes, a pesar del estado de su salud, ninguno de éllos —una mezcla de
todas las razas y sexos— será atendido sin una sonrisa de “oreja a oreja”.
Al mirar alrededor, me animo y cobro fuerzas.
Me
sumaré a este grupo sin importar por cuánto tiempo para salir de ésto una
persona mucho más fuerte. Planeo sonreír más cada día ahora que he aprendido su
verdadero significado.
Dave Wilton, copyright
2002
Fuente:
www.motivateus.com
La reflexión de hoy, escrita desde la
perspectiva de un paciente en un hospital, no es en realidad tan sólo un
llamado a un grupo de profesionales de la medicina, sino más bien un desafío a
todos nosotros. Y es que el autor, a pesar de su estado de salud, reconoce el
valor espiritual y terapéutico que una sonrisa puede ofrecer. ¡Caramba!
No
es tan sólo que el sonreír nos bendiga a nosotros mismos —ya hemos escuchado
que sonriendo, tensamos muchísimos menos músculos que frunciendo el ceño—, sino
que a través de la sonrisa cálida y genuina podemos compartir paz y sanidad a
quienes tanto lo necesitan. Obviamente, el énfasis está en la calidez y
genuinidad de una sonrisa que nace en el corazón y no simplemente en la
intención de pasar por socialmente correctos.
Tal vez sea ese parte de nuestro
servicio a DIOS: sonreír a los demás, darle ánimo y alegrarles el día.
Pero tal vez tú pienses que la sonrisa
no brota tan rápidamente en tu rostro y
que necesitas ayuda. Entonces, ¿por qué no
dedicar un tiempito este fin de semana para acercarnos —junto con tantos otros
que necesitan al Señor—, a una congregación y adorar con éllos, abriendo
nuestros corazones para recibir no sólo la paz, poder y sabiduría que todos
necesitamos, sino también la gracia para bendecir a cuantos nos rodean… con una
sonrisa del corazón?
¡Adelante! Que el Señor continúe bendiciéndote.
Raúl Irigoyen.
El Pensamiento Del Capellán.
ORACIÓN: Gracias
Padre Celestial por el día que me das y porque puedo dar ánimo a nuestro prójimo
a través de una sonrisa. Ayúdame Señor, para que mi sonrisa sea cálida y
genuina, de corazón. Y que este fin de semana al acercarme a una congregación
para alabarte y adorarte junto con otros, reciba en mi corazón la paz, el poder
y la sabiduría que necesitamos y Tu gracia para poder bendecir a nuestro
prójimo. En el nombre de Cristo, amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario