ESCUCHA SU LLAMADO
PROVERBIOS 1:26-27 “ahora yo me burlaré de ustedes cuando caigan en desgracia. Yo seré el que se ría de ustedes cuando les sobrevenga el miedo, cuando el miedo les sobrevenga como una tormenta y la desgracia los arrastre como un torbellino”.
La necedad impera entre las masas. La necedad corre libremente y se apodera de las mentes y los corazones de aquellos que no han querido poner atención al llamado de la Sabiduría. A pesar de que todos están buscando obtener el mayor valor al más bajo costo, la Sabiduría que es gratuita y está disponible para todos aquellos que acepten Su invitación, no es buscada ni es considerada como un buen negocio.
Muchos prefieren buscar la ruta del negocio fácil, de los placeres inmediatos, de la picardía y el engaño, de la explotación del prójimo y se olvidan de que sólo les basta escuchar la voz de la Sabiduría y vivir en el temor del SEÑOR para alcanzar la paz y el bienestar. Tarde será cuando se den cuenta de que su estilo de vida y las decisiones que tomaron les causarán un sabor muy amargo como resultado de haber sembrado la semilla de la necedad y haber ignorado la invitación que les extiende la Sabiduría.
Busca a DIOS. Escucha Su llamado. Te está llamando a tí. Escucha Su invitación. Sigue Sus pasos. Pon atención a lo que Te dice. No te detengas. No voltees a mirar lo que dejas atrás. Nada en el mundo se puede comparar con los beneficios y bendiciones que recibe quien ha decidido obedecer a DIOS y a actuar de acuerdo a Su Palabra.
Atender el llamado de la Sabiduría es el mejor negocio que puedes hacer en tu vida. Ignorar Su llamado será la peor decisión que habrás tomado. ¿Qué te impide escuchar la dulce voz del SALVADOR que te extiende Su mano para colocarte en un lugar de privilegio y honor?
Detén tu carrera y haz una pausa. Piensa con mucho cuidado que camino prefieres seguir. Tienes dos opciones. El camino de la victoria y el camino del fracaso. DIOS te llama a transitar por el camino de la gloria y la santidad. ¿Quieres seguirle? ¡Sólo a DIOS sea la gloria!
OREMOS: PADRE Celestial. Gracias por las bendiciones que recibo permanente de Ti. Gracias por la vida, la salud, el trabajo, mi familia, mis amigos, mis seres queridos, todas son bendiciones Tuyas. Perdóname SEÑOR si te he fallado, y ayúdame a hacer Tu voluntad y a agradarte permanentemente. En el nombre de CRISTO, amén.
Visita nuestra página web en la siguiente dirección: http://www.meditaciondiaria.org/
No hay comentarios:
Publicar un comentario