Tú puedes.
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meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
QUIÉN CONTROLA TU LENGUA
PROVERBIOS 13:3 “El que
refrena su lengua protege su vida, pero el ligero de labios provoca su ruina.”
Se estima que una persona conversadora puede hablar más de treinta
mil palabras al día. Pero sea poco o sea mucho lo que hablamos, la pregunta
importante es: ¿cómo afecta a los demás lo que hablamos? Las palabras que salen
de nuestra boca pueden tener consecuencias positivas o negativas.
¿Puedes recordar alguna ocasión en la que algo que dijiste en un
momento inoportuno te causó problemas y sufrimientos? Lo más probable es que éstos
no hubieran sucedido nunca de haber pensado por un momento antes de hablar.
Una pequeña historia cuenta que un filósofo griego pidió a su
sirviente que le cocinara el mejor plato posible. El sirviente, que era muy
sabio, preparó un plato de lengua diciendo: -"Es el mejor plato de todos,
porque nos recuerda que podemos usar la lengua para bendecir y expresar
felicidad, disipar la tristeza, eliminar la desesperación y propagar aliento.-"
Posteriormente, al sirviente le pidieron que cocinara el peor plato posible. Y
otra vez preparó un plato de lengua diciendo: -"Es el peor de los platos
porque nos recuerda que podemos usar la lengua para maldecir y romper
corazones, destruir reputaciones, crear contiendas y poner a las familias y las
naciones en guerra.-"
Un viejo dicho dice: -"SEÑOR, permite que mis palabras sean
dulces y tiernas, no sea que mañana yo tenga que comérmelas.-" No tenemos
que comer lengua para entender lo que quiso decir el sirviente. Pero es posible
que tengamos que "comernos” nuestras palabras con bastante frecuencia
antes de aprender a evitar decir cosas de las que después nos gustaría
retractarnos.
La Biblia nos alerta acerca del poder de la lengua en Santiago3:5 "Así también la lengua es un miembro pequeño, pero
se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño
fuego!" Debemos vivir conscientes del poder que tiene la lengua tanto para
destruir como para construir.
En el pasaje de hoy, Salomón escribió: “Hay quien habla sin tino como
golpes de espada, pero la lengua de los sabios sana.” La lengua puede golpear y
hasta matar como una espada o puede traer sanidad física, mental y espiritual como
buena medicina. Dice también: “Hay engaño en el corazón de los que traman el
mal, y gozo en los consejeros de paz.” Un corazón engañoso siempre manifestará
maldad, pero un corazón lleno del gozo del SEÑOR producirá palabras de paz, de
amor y de aliento.
¿Hablas tú palabras de enfermedad o palabras de salud? ¿Eres capaz
de expresar amor y afecto a los que te rodean cuando les hablas? Si quieres que
tu lengua edifique a las personas y no las destruya, llena tu corazón de la
Santa Palabra de DIOS, medita en élla y ora día tras día pidiendo al SEÑOR sabiduría.
OREMOS: PADRE Santo, te ruego que
me des sabiduría para medir mis palabras antes de que salgan de mi boca. Que mi
lengua sea controlada por tu SANTO ESPÍRITU y que todo lo que yo hable
glorifique Tu nombre. Por CRISTO JESÚS, amén.
Visita nuestra página web en la siguiente dirección: http://www.meditaciondiaria.org/
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