Señor, líbranos del mal...
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Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
por Richard M. Publiese
MALDICIÓN
PROVERBIOS 26:2 Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo, así la maldición nunca vendrá sin causa. (Reina y Valera)
Como gorrión perdido o golondrina sin nido, la maldición sin motivo jamás llegará a su destino. (Dios Habla Hoy)
El mundo invisible espiritual es tan real como el aire que respiramos. No lo vemos pero está siempre presente. La Biblia enseña que lo espiritual e invisible dió lugar a lo material y visible. Eso lo vemos en la creación del universo por la Palabra de Dios. Debido a la rebelión de Lucero, un ángel especial creado para hacer música y guiar a los angeles a adorar a Dios, éste se transformó por su rebelión en un ser despreciable y maldito llamado diablo o satanás. A partir de ese momento se originó una dualidad o dos caminos: La bendición, estando del lado de Dios, y la maldición estando lejos de Dios.
Hoy día se habla mucho acerca de las maldiciones que una gitana o un hechicero o brujo puede hacerle a alguien. Miles de personas viven atemorizadas porque alguien les juró que les iban a enviar o echar una maldición. Todo esto no es un juego, y debemos decir que si no estamos del lado de Dios, tomados de la mano del Señor Jesucristo, los efectos del mal pueden alcanzarnos.
La maldición, como dice el pasaje de hoy, nunca viene sin causa. Ella no viene por casualidad sino por algo específico que se ha hecho. Como cristianos podemos evitarla sabiendo que el maligno no puede tocarnos. Sólo debemos mantenernos bajo la cobertura de Cristo y cubiertos con su Sangre preciosa.
Si tú estás con Cristo y viviendo de acuerdo a la Palabra de Dios no tienes nada que temer. No existe ninguna maldición que te pueda alcanzar. Los cristianos hemos sido llamados sólo para recibir bendición de parte de nuestro Padre Celestial.
CONFESION DE FE:
VIVO BAJO LA BENDICION DE DIOS Y NINGUNA MALDICION ME ALCANZA
ORACION:
Gracias Jesús porque estando a Tu lado, vivo bajo Tu preciosa bendición. En Tu Nombre. Amén.
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