¿QUÉ ESTOY HACIENDO POR EL POBRE?

Cumplir Su voluntad sirviendo a los demás…

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Bendiciones,

Enio

Meditación Diaria  

¿QUÉ ESTOY HACIENDO POR EL POBRE?

PROVERBIOS 19:4 “Con las riquezas aumentan los amigos, pero al pobre hasta su amigo lo abandona.”

Cuando la situación financiera se torna difícil y el dinero acumulado comienza a escasear, a la gente no le queda más remedio que adaptarse a las nuevas circunstancias, cosa por cierto que no es muy fácil.  Hay pobres que nacieron sin recursos y toda su vida la han pasado en constante pobreza.  Hay también pobres que antes de serlo llegaron a disfrutar cierto respiro económico y podían mantener cierto estilo de vida reservado para quienes están financieramente cómodos; a éstos les cuesta mucho adaptarse a la nueva situación.  

Por otra parte, la pobreza no solamente se refiere a la escasez de dinero o a la falta de un ingreso estable.  La pobreza puede ser un estado mental.  Hay personas que han perdido la esperanza de llegar a vivir con un mínimo de comodidad y ya ni siquiera intentan encontrar una vía que les permita escapar de la estrechez de recursos.  También vemos que hay personas que carecen de criterio, gracia, educación, sentido común, amor, ánimo, alegría, ideas, iniciativa, etc., etc.  Es decir, no sólo es pobre quien no posee bienes sino también aquel a quien le falta ejercitar sus virtudes, talentos y destrezas.

Los pobres no tienen amigos que los ayuden y nosotros no podemos pasar por alto que hay mucha gente pasando harto trabajo por no tener quien los asista a mitigar su situación.  

Como hijos de DIOS debemos buscar oportunidad para servirles por medio del servicio a los pobres.  El Señor Jesús dijo: “Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aún por el más pequeño, lo hicieron por mi”.  Mateo 25:40. 

Así que alimentemos al hambriento, demos de beber al sediento, alojemos al forastero, vistamos al que le falta ropa, atendamos al enfermo, visitemos al preso, alentemos y animemos a los pobres en espíritu. 

De esta manera estaremos sirviendo a nuestro amado Señor Jesús.  De esta forma, estaremos estableciendo el reino que DIOS ha preparado para nosotros desde la creación del mundo. ¡Y solo a DIOS sea la Gloria!

ORACIÓN: Padre Eterno. Gracias te doy por el nuevo día que me das y por las bendiciones y salud. Por el amor de mis seres queridos. Por mi trabajo y comodidades que tengo. Señor gracias por todo. Sé que hasta el momento he hecho muy poco por el pobre y necesitado, tanto material como espiritualmente. Ayúdame a dejar de lado las cosas que me impiden cumplir con Tu voluntad. Ayúdame Señor. Te lo pido en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, amén.