martes, 13 de septiembre de 2016

LA IRA PECAMINOSA

Ayúdame Señor…
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Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
LA IRA PECAMINOSA
SANTIAGO 1:19,20 “Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto oir, tardo para hablar, tardo para airarse, porque la ira del hombre no obra la justicia de DIOS.”
La ira puede romper la comunicación y destruir amistades. Si es reprimida, este sentimiento se convierte en resentimiento, lo cual daña la mente y la conducta. Si no es controlada, la ira puede manifestarse con una expresión de rabia que hiere no sólo a quien es dirigida, sino también a otros.
Aunque podamos pensar en muchas razones para justificar nuestra ira, el único criterio que importa es el del SEÑOR. El libro de Proverbios ofrece una perspectiva clara de cómo ve el SEÑOR a la persona airada. ÉL dice que “actúa locamente” (Proverbios 14:17), “promueve contiendas” (Proverbios 15:18) y “comete pecado” (Proverbios 29:22). También nos alerta en cuanto a “no asociarnos con tales personas” (Proverbios 22:24).
En cambio, quienes son lentos para la ira “son grandes de entendimiento” (Proverbios 14:29) y “demuestran sabiduría” (Proverbios 29:8,11). Alejarse de la contienda es también “honroso para la persona” (Proverbios 20:3).
En el Nuevo Testamento, el apóstol Santiago compara a la lengua con una pequeña chispa que “puede incendiar a todo un bosque” (Santiago 3:5,6). Él sabía el daño que puede hacer una persona airada. También escribió que nuestra ira no produce la vida de santidad que DIOS desea para nosotros, ni tampoco corresponde con lo que somos en Cristo. Jesús pagó nuestra deuda por el pecado con su vida para liberarnos de nuestra conducta pecaminosa.
Las pocas veces que Jesús se airó estuvieron acorde con los propósitos de DIOS. Pero, en nosotros, el sentimiento de ira se origina por lo general como una autodefensa o por los deseos frustrados.
Si DIOS te ha declarado culpable de tener una ira pecaminosa, arrepiéntete de tu pecado y permite que el Espíritu Santo reproduzca en tí el carácter de Cristo.

ORACIÓN: Señor, Padre Celestial. Líbrame de ser una persona rencorosa que pierde la paciencia y es fácil de airarse. Que si me enojo, no llegue a pecar.. Te lo pido en el nombre de Cristo, amén.

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