Búscalo, conversa con Él y entrégale tus aflicciones.
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Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
DESDE
2ª CORINTIOS 4:16-18 “Por eso no nos desanimamos. Pues aunque por fuera nos vamos deteriorando, por dentro nos renovamos día a día. Lo que sufrimos en esta vida es cosa ligera, que pronto pasa; pero nos trae como resultado una gloria eterna mucho más grande y abundante. Porque no nos fijamos en lo que se ve, sino en lo que no se ve, ya que las cosas que se ven son pasajeras, pero las que no se ven son eternas.”
Si tú has viajado por avión, has experimentado el
emocionante instante del “despegue”. Mientras el avión se eleva, los objetos en
tierra se tornan pequeños y más pequeños hasta que el avión cruza las nubes.
Entonces, con la almohada de nubes abajo, tu ereS transportado hacia otra
tierra maravillosa con una nueva perspectiva.
Cuando las dificultades y los problemas invaden
nuestra vida, con frecuencia ponemos toda nuestra atención en éllos, mirando
hacia abajo como si estuviéramos en un avión.
El resultado es que, a veces, olvidamos que DIOS
tiene un punto de vista completamente diferente y superior. Desde Su
perspectiva, cada evento tiene un propósito que encaja perfectamente en Su
plan.
El pasaje de
Esto también nos recuerda que, mientras estamos en la tierra,
no son las cosas visibles, sino las cosas invisibles las que son eternas… “Porque no nos fijamos
en lo que se ve, sino en lo que no se ve, ya que las cosas que se ven son
pasajeras, pero las que no se ven son Eternas.”
¿Qué aflicciones en tu vida, son causa de que tú apartes tu
mirada de DIOS? ¿Te ha herido alguien?
¿Estás decepcionado? ¿Sientes que no te consideran? ¿Hay circunstancias
frustrantes que te impiden que goces de la vida?
DIOS, tu PADRE Celestial, anhela aliviarte de esas cargas. ÉL
desea mostrarte Su perspectiva. Cuando tú tengas el punto de vista de DIOS, serás
capaz de enfrentar tus circunstancias con la confianza de que ÉL te guiará a
través de tus dificultades. Y como resultado, el SEÑOR te permitirá sobrepasar
tus dificultades llevándote a un nuevo horizonte de crecimiento espiritual.
Búscalo, conversa con ÉL y entrégale tus aflicciones. Deja en
Sus manos tus problemas y angustias. En Él encontrarás la paz y tranquilidad
que sólo Él puede dar.
OREMOS: SEÑOR, te entrego mis aflicciones. Sé que eres el
Único que me puede ayudar. Gracias DIOS mío por las pruebas de Tu amor. En el
amor CRISTO JESÚS, amén.
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