Cuando colocas tus preocupaciones en las manos de
DIOS,
DIOS coloca paz en tu corazón.
DIOS coloca paz en tu corazón.
Comparte esta meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
¡LAS PREOCUPACIONES TERMINAN DONDE
LA FE EN DIOS COMIENZA!
Renuevo De Plenitud
ISAÍAS 41:10 “(Hoy DIOS te dice): No temas, porque yo
estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo;
siempre te ayudaré,
siempre te sustentaré
con la diestra de mi
justicia.”
Cuántas veces nos preocupamos por las cosas
antes de que pasen… Ansiedad, angustias y preocupaciones que al final del día
no nos permiten ver que DIOS tiene el control de todas las cosas.
“Pues que a su amado dará DIOS el sueño.” Salmos 127:2.
Nuestra vida no debe ser una vida de
preocupaciones e inquietudes, sino vida de fe gozosa y tranquila. Nuestro Padre
Celestial proveerá las necesidades de Sus propios hijos, y sabe lo que
necesitamos antes de que lo pidamos.
Por lo tanto, podemos retirarnos a nuestro
lecho a su debido tiempo, sin necesidad de velar para trazar planes y proyectos
para el futuro.
Si sabemos confiar en nuestro DIOS, no
estaremos desvelados durante la noche con el corazón atormentado por el temor,
sino que echaremos nuestra solicitud en manos del Señor, sólo pensaremos en Su
gracia y tendremos un sueño dulce y reparador.
Nuestra mayor gloria consiste en ser amados
del Señor, y quien la posee no debe ambicionar otra cosa; por tanto, debe
desaparecer todo deseo egoísta.
¿Qué
hay más grande en el cielo que el amor de DIOS?
Descansa, pues, alma mía, porque en Él tienes
todas las cosas. Sin embargo, vivimos agitados hasta que el Señor nos da, no
sólo razones para que descansemos, sino el descanso mismo. Jesús lo hace así.
ÉL es nuestra paz, nuestro descanso, nuestro
todo. En su seno dormiremos tranquilos en vida y en muerte.
Hoy es un
día más para descargar nuestras preocupaciones y dejarlas en el Altar.
OREMOS: Señor, Gracias porque eres nuestra paz y esa paz se experimenta más
cuando estoy rodeado de angustias.
Ayúdame a descansar sólo en Tí. En Tu Nombre, amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario