¿Alguien “de confianza” te ha fallado?
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Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
¿ALGUIEN “DE CONFIANZA”
TE HA FALLADO?
SALMOS 27:10 “Aunque
mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá en sus brazos.”
¿Por
qué será que en tiempos de problemas, muchos de aquellos en quienes más
confiamos se olvidan de nosotros? ¿Por qué aquellos amigos con quienes pensamos
que podemos contar, inesperadamente desaparecen durante nuestros días más
difíciles? Estas son preguntas dolorosas de considerar pero, a veces, éllas
representan la cruda realidad. Hay muchas razones por las que otros nos fallan.
Aunque examinar las causas no borra nuestro dolor, nos ayuda a procesar y
entender el por qué somos frecuentemente decepcionados por nuestros amigos.
Quizás
tú has visto algunas de las siguientes situaciones o emociones en la vida de
los amigos que se han distanciado de ti: Se sienten incapaces para ayudar;
Celos; Insensibilidad; Temor de enfrentar los problemas; Egocentrismo; Un
espíritu crítico, etc., etc.
El
apóstol Pablo ciertamente estuvo familiarizado con esta lista. Mientras
escribía su carta a Timoteo, lo habían abandonado sus amigos y fue dejado para
que se enfrentara solo a las amenazas que sobre él se cernían. “nadie me respaldó,
sino que todos me abandonaron”, dice en (**) 2a Timoteo 4:9-18 el versículo
16, pero pon atención a lo que dice el versículo siguiente: “Pero el Señor estuvo
a mi lado, y me dio fuerzas.”
La
fe de Pablo en el SEÑOR, al que amó y en el que confió, se manifiesta en esta
frase a pesar de su triste situación.
Esta
misma seguridad debemos tenerla nosotros pues DIOS nunca nos dejará ni nos
desamparará, como prometió a Josué: "Nadie te podrá derrotar
en toda tu vida, y yo estaré contigo así como estuve con Moisés, sin dejarte ni
abandonarte jamás." (Josué 1:5).
En
los momentos más difíciles de su vida, el mismo JESÚS fue negado y abandonado
por Sus discípulos, algunos de los cuales habían prometido dar su vida por él. Allí en Getsemaní, en el momento en que JESÚS
era arrestado, dice
La
fidelidad es un atributo de DIOS, pero no es precisamente un atributo humano.
Todo lo contrario, por regla general podemos afirmar que, en mayor o menor
grado, es la infidelidad lo que nos caracteriza.
En
el Salmo 27:10: “Aunque
mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá en sus brazos”, el salmista enfatiza en la fidelidad de DIOS, al
mismo tiempo que admite que aún sus padres pudieran abandonarlo.
Esta
es la seguridad con la que debemos vivir, que en su inmenso amor y
misericordia, DIOS permanece fiel aunque nosotros le seamos infieles. Dice 2a
Timoteo 2:13: “Si
fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo.”
Si
has sufrido una decepción producto de que alguna persona amada te falló,
reflexiona en esta enseñanza y con todo tu corazón aplícala a tu vida.
Aférrate
del amor de DIOS, pasa tiempo con ÉL en oración y deposita en ÉL tu confianza.
Muy pronto el SEÑOR sanará tus heridas y llenará tu corazón de Su paz inefable.
OREMOS:
PADRE Amado, gracias por Tu fidelidad. Muchas veces te he fallado pero Tú
siempre estás dispuesto a acudir en mi ayuda en los momentos difíciles de mi
vida. Ayúdame a confiar plenamente en Tí aún cuando mis amigos y los que dicen
que me aman, me abandonen. En el nombre de JESÚS, amén.
**Leer 2a Timoteo 4:9-18
Haz todo lo posible por venir a verme cuanto
antes, pues Demas, por amor a este mundo, me ha abandonado y se ha ido a
Tesalónica. Crescente se ha ido a Galacia y Tito a Dalmacia. Sólo Lucas está conmigo.
Recoge a Marcos y tráelo contigo, porque me
es de ayuda en mi ministerio. A Tíquico
lo mandé a Éfeso.
Cuando vengas, trae la capa que dejé en
Troas, en casa de Carpo; trae también los libros, especialmente los
pergaminos.
Alejandro el herrero me ha hecho mucho daño.
El Señor le dará su merecido. Tú también cuídate de él, porque se opuso
tenazmente a nuestro mensaje.
En mi primera defensa, nadie me respaldó,
sino que todos me abandonaron. Que no les sea tomado en cuenta. Pero el Señor estuvo
a mi lado y me dio fuerzas para que por medio de mí se llevara a cabo la
predicación del mensaje y lo oyeran todos los paganos. Y fui librado de la boca
del león. El Señor me librará de todo mal y me preservará para su reino
celestial. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
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