Nueve pasos específicos para vencer el
desánimo.
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meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
CÓMO VENCER EL DESÁNIMO
Por Charles
Stanley
SALMO 42:1 “Como el ciervo brama por las corrientes de
las aguas,
así clama por ti, DIOS, el alma mía.”
Para vencer el desánimo permíteme
sugerirte nueve pasos específicos:
1.
Hazte un auto evaluación. Examina las causas, con honestidad y en oración.
2.
Admite que estás desanimado. Es fácil evitar, ignorar o mentir acerca del
desánimo. Pero no aceptarlo es fatal, y éso garantiza el fracaso.
3.
Identifica específicamente la causa de tu desánimo. Llámala por su nombre, y
luego enfréntela.
4. Recuerda la naturaleza del desánimo. Las
frustraciones vendrán y se irán, pero el desánimo es por elección propia.
5.
Comienza a meditar con frecuencia en la Palabra de DIOS. De esta manera, podrás determinar con
precisión lo que sientes, porque entonces será algo real (Salmo 3:2-4; Salmo
16:7,8; Salmo 63.6-8; Salmo 77:12; Salmo 119:15).
6.
Lleva tu desánimo a DIOS en oración. Pídele que te revele qué quiere enseñarte
en esta área de tu vida.
7.
Concéntrate en DIOS, no en tu situación. Pídele que te ayude a ver esta
frustración y Sus lecciones desde tu perspectiva.
8.
Ve la causa como proveniente del Señor. Si entendemos que Él permite las
frustraciones, podemos encontrar una oportunidad para crecer, aún en las
dificultades.
9.
Declara estas tres verdades en voz alta: el Padre Celestial está conmigo en el
dolor; ÉL tiene el control de mi vida, y ha permitido ésto por alguna razón; ÉL
es un DIOS bueno, que convertirá esta frustración en una bendición.
El desánimo puede parecer muy inofensivo, pero no
subestimes nunca su poder destructivo. Si te mantienes alerta, podrás evitar
esta trampa mortal. Entonces, escribe estos nueve pasos en una tarjeta, y
examina la lista siempre que las frustraciones comiencen a consumirte la mente.
OREMOS: Señor, te suplico que cuando se
presente el desánimo en mi vida me ayudes a superarlo. Gracias por estas
recomendaciones que me serán útiles. Gracias Señor por las pruebas de Tu amor.
En el nombre de Cristo, amén.
Lectura Biblica: Salmo 42:1-8
1 Cual ciervo jadeante en busca del
agua, así te busca, oh DIOS, todo mi ser. 2 Tengo sed de DIOS, del DIOS de la
vida. ¿Cuándo podré presentarme ante
DIOS? 3 Mis lágrimas son mi
pan de día y de noche, mientras me echan en cara a todas horas: «¿Dónde está tu
DIOS?»
4 Recuerdo esto y me deshago en
llanto: yo solía ir con la multitud,
y la conducía a la casa de DIOS. Entre
voces de alegría y acciones de gracias hacíamos gran celebración.
5 ¿Por qué voy a inquietarme? ¿Por
qué me voy a angustiar? En DIOS pondré
mi esperanza y todavía lo alabaré. ¡Él es mi Salvador y mi DIOS!
6 Me siento sumamente angustiado;
por eso, mi DIOS, pienso en ti
desde la tierra del Jordán, desde
las alturas del Hermón, desde el monte Mizar. 7 Un abismo llama a otro abismo en
el rugir de tus cascadas; todas tus ondas y tus olas se han precipitado sobre
mí. 8 Ésta es la oración al DIOS de mi vida: que de día el Señor
mande su amor, y de noche su canto me acompañe.
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