Lamento lo que
hice…
Comparte esta
meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
¿COMETISTE UN ERROR?... DISCÚLPATE
Nuestro
Pan Diario
MATEO
5:23-24 "Por tanto, si […] te acuerdas de que tu hermano tiene algo
contra ti, […] anda, reconcíliate primero con tu hermano… " —
Marcos cometió un error. Llegó una
hora tarde a un restaurante donde tenía que encontrarse con una amiga de la universidad.
La amiga ya se había ido.
Como se sentía mal por el error,
compró un cupón de regalo para comer en ese lugar y se detuvo en una librería
para buscar una tarjeta que dijera que lamentaba lo sucedido.
Entre cientos de tarjetas, se
sorprendió al encontrar en un recóndito rincón de la tienda solo unas pocas que
decían: «Lamento lo que hice». Compró una y se la dio a su amiga, la cual
aceptó la disculpa.
Aunque las tarjetas para pedir
disculpas no sean populares, asumir esta actitud suele ser algo necesario en
nuestras relaciones interpersonales.
Pedir perdón es una acción bíblica.
Jesús les enseñó a sus seguidores a arreglar las cosas con aquellos a quienes
habían ofendido (Mateo 5:23-24). "Si tu hermano te hace algo malo, habla con él a solas y hazle reconocer
su falta. Si te hace caso, ya has ganado a tu hermano." (Mateo 18:15).
Y el apóstol Pablo dijo: «Si es posible, en
cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres»
(Romanos 12:18).
Vivir en paz quizá exija pedir
disculpas. Tal vez resulte difícil disculparse porque esta actitud requiere que
tengamos un espíritu humilde para admitir nuestro error, lo cual no brota de
nosotros naturalmente.
Pero asumir la responsabilidad del
daño que hicimos en una determinada situación puede sanar una relación y
restaurarla.
¿Cometiste un error? Trágate el
orgullo y da el primer paso… aunque no puedas encontrar una tarjeta que te
ayude a decirlo. La mejor manera de tener la última palabra es disculparse.
ORACIÓN:
Padre Celestial, ayúdame a dejar mi orgullo de lado y guíame para poder dar el
primer paso de reconocer mi falta y pueda pedir disculpas. Gracias Señor. En el
nombre de Cristo, amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario