Su presencia…
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Bendiciones,
Enio
Devocional Diario
DIOS
ESTÁ PRESENTE EN LOS DÍAS MALOS
Por Charles Stanley
ISAÍAS 14:27 “El
Señor todopoderoso lo ha decidido, y nadie podrá oponérsele. Su mano está
amenazando, y nadie lo hará cambiar de parecer”.
En las noticias vemos regularmente imágenes de
calamidades en nuestro mundo. Y, en lo personal, también experimentamos tiempos
difíciles. Lo mismo sucede con familiares y amigos que enfrentan dificultades
con sus hijos, la pérdida de sus empleos, rupturas matrimoniales, etc., etc.
Como
cristianos, tenemos un Padre Celestial que ha prometido estar con nosotros en
nuestras dificultades. Podemos confiar en
ÉL; DIOS sabe antes que nosotros lo que sucederá; nada está oculto a Sus ojos
(Hebreos 4.13). ÉL ve en la oscuridad de los tiempos difíciles
con tanta claridad como lo hace a la luz del día (Salmos
139.11, 12).
Por
medio de su Espíritu, el Señor nos da el consuelo, las fuerzas y la sabiduría
para perseverar. La historia de José ilustra esta verdad. Tras ser rechazado
por sus hermanos, y vendido como esclavo, fue acusado falsamente por la esposa
de su amo y encarcelado. Pero en medio de ese tiempo, el joven hebreo
experimentó la presencia y el favor divinos.
Dudo
que José (Génesis 39.1-23) comprendiera los designios del Señor durante su esclavitud y
encarcelamiento. Pero después, como segundo al mando después de Faraón,
entendió el propósito de DIOS al permitir esos años difíciles. Al final, José
evidenció lo que él sabía que era la verdad. Sus hermanos habían pensado
hacerle daño, pero DIOS
usó todo su sufrimiento para llevar a feliz término su plan (Génesis
45.4-8; 50.20).
Cuando los problemas te golpeen, recuerda
la verdad de DIOS, y cobra ánimo. El
Espíritu Santo que mora en nosotros tiene los recursos para darnos lo que
necesitamos, prepararnos para la jornada y sostenernos con Su presencia durante
los días malos. Nada puede impedir que los propósitos de nuestro Señor se
cumplan (Isaías
14.27).
ORACIÓN: Padre nuestro, me acerco a Tí para que me des la
sabiduría que necesito para conocerte, comprenderte y confiar en Tí. Tú me
conoces. Gracias Señor. En el nombre de Cristo Jesús, amén.
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