Después de un estricto
aprendizaje…
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meditación.
Bendiciones,
Enio
Meditación Diaria
¿AL BORDE DE LA MUERTE?
SALMOS
22:15 “Se ha secado mi vigor como una
teja; la lengua se me pega al paladar. ¡Me has hundido en el polvo de la
muerte!”
Algunas situaciones de las muchas que nos toca atravesar
pueden llegar a ser extremas e intensas, todo de acuerdo con el nivel de
aprendizaje que se debe alcanzar o la necesidad de que ese aprendizaje sea
firme y profundo. Todos hemos sido creados por DIOS con diversos propósitos en
esta vida y para llevarlos a cabo es necesario contar con ciertas destrezas que
sólo se pueden obtener a través de un estricto aprendizaje. Es posible que
algunas de las experiencias que tengas que atravesar te coloquen al borde de la
muerte y eso te haga pensar que todo está perdido o que todo ha sido en vano.
Si bien nuestra meta es la vida eterna, el cumplimiento de
esta meta no ocurre en esta vida sino en la vida futura por lo que esa muerte a
la que tanto tememos no es un estado final sino el comienzo de una vida eterna
y maravillosa en la presencia de DIOS nuestro Creador. Si la experiencia que
nos toca vivir en estos momentos nos hace pensar que perderemos la vida no nos
dejemos apabullar por estos pensamientos derrotistas.
DIOS no permitirá que perdamos la vida sin antes haber
cumplido con el propósito para el cual fuimos creados. Lo importante es que
mantengamos una sólida relación con nuestro Señor Jesucristo para que nuestros
actos tengan sentido, valor y propósito y para que disfrutemos de la paz que
sólo pueden tener quienes confían plenamente en ÉL.
La despedida final del apóstol
Pablo ha inspirado a innumerables seguidores de Cristo a través de los siglos.
Escribió: «El tiempo
de mi partida está cercano. He peleado la buena batalla, he acabado la carrera,
he guardado la fe» (2 Timoteo
4:6-7). Su consejo a Timoteo se extiende más allá del
tiempo para desafiarnos también a nosotros.
La carta comienza y termina con la gracia de DIOS, mientras
que su contenido es una celebración por la incesante fidelidad del Señor. Un
mensaje de los moribundos puede dar sentido a los vivientes.
El final triunfante de Pablo, «A El sea gloria por
los siglos de los siglos» (2 Timoteo 4:18), es un mensaje que puede
incentivarnos a todos en esta vida.
Si estamos
preparados para morir, lo estamos para vivir.
ORACIÓN: Señor… Ayúdame a vivir una
vida que al final pueda decir como el Apostol Pablo «El tiempo de mi partida está cercano. He
peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe». Permíteme Señor que así sea. Te lo pido en el Nombre de Cristo, amén.
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