LOS MOMENTOS DE TENTACIÓN

Todos luchamos con la tentación.

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Bendiciones,

Enio

Meditación Diaria

LOS MOMENTOS DE TENTACIÓN

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1ª CORINTIOS 10:6-13 “De esto que le sucedió a nuestro pueblo, nosotros tenemos que aprender nuestra lección. No debemos desear hacer lo malo como ellos. ⁷ Ni debemos adorar a los ídolos, como hicieron algunos. Así dice la Biblia: «La gente se sentó a comer y beber, y luego se puso a bailar en honor de los ídolos.» ⁸ Tampoco debemos tener relaciones sexuales prohibidas, como lo hicieron algunos de ellos. ¡Por eso, en un solo día murieron veintitrés mil! ⁹ No tratemos de ver cuánto podemos pecar sin que Cristo nos castigue. Algunos del pueblo lo hicieron, y murieron mordidos por serpientes. ¹⁰ Tampoco debemos quejarnos, como algunos de ellos lo hicieron. Por eso el ángel de la muerte los mató.

¹¹ Todo eso le sucedió a nuestro pueblo para darnos una lección. Y quedó escrito en la Biblia, para que nos sirva de enseñanza a los que vivimos en estos últimos tiempos. ¹² Por eso, que nadie se sienta seguro de que no va a pecar, pues puede ser el primero en hacerlo. ¹³ Ustedes no han pasado por ninguna tentación que otros no hayan tenido. Y pueden confiar en Dios, pues él no va a permitir que sufran más tentaciones de las que pueden soportar. Además, cuando vengan las tentaciones, Dios mismo les mostrará cómo vencerlas, y así podrán resistir.“ 

Todos luchamos con la tentación. De hecho, incluso CRISTO fue tentado, pero resistió y nunca pecó. De esto se desprende claramente que ser tentado en sí no es pecado. Sin embargo, si dejamos que la tentación eche raíces en nuestros pensamientos, nos dirigimos hacia el pecado. Sin duda alguna, llevar a cabo un mal deseo es pecado, pero la Biblia nos dice que abrigar deseos perversos también lo es: “Por eso, den muerte a todos sus malos deseos; no tengan relaciones sexuales prohibidas, no sean indecentes, dominen sus malos deseos, y no busquen amontonar dinero, pues es lo mismo que adorar a dioses falsos.” (Colosenses 3:5).

Entonces, ¿de dónde viene el impulso de pecar? La fuente es triple: la tentación proviene de nuestros propios deseos: “Al contrario, cuando somos tentados, son nuestros propios deseos los que nos arrastran y dominan.” (Santiago 1:14), del diablo: “Luego el Espíritu de Dios llevó a Jesús al desierto, para que el diablo tratara de hacerlo caer en sus trampas.” (Mateo 4:1), y del sistema del mundo organizado bajo la autoridad de Satanás: “Sabemos que somos de Dios, y que el resto de la gente en el mundo está dominada por el diablo.” (1ª Juan 5:19). Hasta que CRISTO regrese, la humanidad vivirá en su condición caída, y seremos tentados por los intereses indulgentes y las trampas de Satanás para apartarnos del SEÑOR.

Las maneras en que somos tentados no nos pasan solo a nosotros; otros han enfrentado situaciones similares. Aunque DIOS no promete ponernos a salvo de todas las tentaciones, las limita y proporciona una vía de escape para que podamos resistir sin pecar.

Siempre que algo le tiente, acérquese con sumisión a DIOS y resista al diablo: “Por eso, obedezcan a Dios. Háganle frente al diablo, y él huirá de ustedes. ⁸ Háganse amigos de Dios, y él se hará amigo de ustedes.” (Santiago 4:7-8). Luego pídale al SEÑOR la gracia y las fuerzas para mantenerse firme.

OREMOS: PADRE Celestial ayúdame a eliminar mis malos deseos y líbrame de caer en las tentaciones. Te lo suplico en el nombre de nuestro Señor JESUCRISTO, amén.

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